Siempre que mi país declara su independencia,vienes a tu embajada y te declaras insolvente. Al principio, te monto en un avión y te lanzo al otro lado de la frontera que me he inventado.Luego te doy semillas y combustible porque odio ver cómo te endeudas con otros países. Después,cuando me quiero dar cuenta,te has llevado todo lo que he podido producir y lo único que puedo hacer es ir a mi embajada en tu país para pedirte un 0,7% de lo que tienes. Casualmente sólo te sobra un 0,69%...Y entonces vuelvo a ser una provincia más de tu nación porque mis rebeldes han muerto de agotamiento e inanición o se han pasado a tu bando.Hasta la próxima revolución.
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