domingo, 28 de octubre de 2007

How sweet, how slow, how hard, how warm? ...Hold me tight

Nunca antes había ido a una boda civil(tercera boda en total)...y como siempre,presas de nuestro pésimo sentido de la orientación,llegamos tarde...yo no sabía que las salas de actos de los ayuntamientos tenían tan buena acústica...si llego a tener en cuenta ese dato,no me pongo tacones...creo que se me acumuló toda la sangre del cuerpo en la cara...
Por otro lado, no entiendo por qué el señor alcalde finalizó el "ritual" con un "que Dios os bendiga"...si ellos hubiesen querido que les dijeran eso,se hubieran ido a casar a la iglesia...hay que joderse(luego me llaman roja y radical...)...

Como es costumbre en los banquetes de boda,me colocaron en la mesa en la que se habla de los temas más interesantes y congruentes con el momento:véase, revisiones de próstata y partos con dolor(sí,entrando en dilataciones y demás...), utilicé mi cada vez más coseguida técnica "where's my mind",sino no hubiera sobrevivido...aparte de los ya inevitables comentarios de corte homófobo y racista,ante los cuales,antes de entrar al trapo,comienzo a practicar algún ejercicio de relajación con tal de no ponerle sombra de ojos de color morado a algún "señor" de los que tan bien me amenizaron la comida...

Después vino el turno de la tradicional capea, en la que el gentío tiene la oportunidad de demostrar cuan alta es la concentración de testosterona que se halla concentrada en su cuerpo y cuan valientes son al meterse en una placita pequeña con una vaquilla famélica del tamaño del perro de mi vecina y con los cuernos limados...en ese instante es en el que me escabullo,pido algo con una pequeña cantidad de alcohol y me voy a un lugar en el que el sol me da justo en la espalda y las piernas(que por otra parte agradecí...),mientras casualmente(y afortunadísimamente)sonaba esta canción:



P.D.:No me gusta nada que la gente me regañe por ponerme tacones y que no se quieran poner a mi lado porque parecen "enanos"...a nadie le gusta parecer gigante...¡¡maldita sea!!(jiji)...

P.D.2:tengo que aprender a bailar ipso facto si no quiero seguir pareciendo un bloque de hielo cuando me sacan a la pista(que suele ser después de que me cojan de brazos y piernas y me muevan...)

3 comentarios:

Blasfuemia dijo...

¿Pero a qué boda has ido tú, niña? ¿partos con dolor y próstata? ¿capeas?. Venga, seguro que hay algo rescatable...

Lo de bailar es subjetivo: déjate llevar.

Anónimo dijo...

En la época en que estaba obligada a usar tacones se demostró que era la persona del mundo que más ruido podía hacer caminando. Y así no había manera de pillar a nadie en un renuncio, claro, cuando aún estaba saliendo del despacho ya estaban diciendo abajo: Pssssss, que viene la jefa.
A las conversaciones sobre dilataciones y dolores de parto vete acostumbrando, que es lo que sigue a las bodas. Al principio se cortan un poco, pero cuando se ven en mayoría, las paridas se desmelenan. A mí en la última reunión de amigas me contaron con tanto detalle cómo les habían quedado los puntos del asunto, que casi me desmayo.
Lo de las capeas no tiene nombre, qué horror.
PD: Tampoco a nosotros nos gusta parecer enanos, joer :-P

Inerzia dijo...

Blasf:No sé,prefiero no preguntarme lo de "¿a qué clase de bodas me invitan?"...
Sí,lo mejor es dejarse llevar...pero con "Paquito el chocolatero" de fondo no puedo...jeje.
Lo rescatable supongo que fue que me dijeran que la boda no hubiera sido lo mismo sin mí(estuve a punto de no ir por el curro),pero claro...si yo no hice más que huir mental y físicamente...

Ohne:Jaja,es que no se puede ser sigilosa...y eso que estuve ensayando la semana anterior por casa(pobres mis vecinos de abajo) con unos muy bonitos que me compré...pero al final me tuve que poner otros con menos peligro de esguince...
No puedo con las dilataciones...es superior a mí...aggg...creo que es una de las razones por las que optaré por adoptar...
Las capeas son lo más hortera-casposo que hay...
Sólo os pedimos un poco de comprensión,que casi siempre vamos en plano,para un día que nos ponemos tacones...qué discriminación!